El pasado lunes 26 de marzo, sobre las diez de la mañana, llegaba al aeropuerto de Valencia cargada con el pasaporte en una mano, mi maleta y un montón de ganas de viajar. Esta vez, tomarÃa un avión con
destino Bérgamo.
Poco a poco, los más de cincuenta alumnos nos fuimos encontrando ante el mostrador de Ryanair para hacer el
check-in. Algunos estaban nervioso pero yo, más que nerviosa, estaba emocionada con viajar a un lugar donde no habÃa estado antes: Italia. Además, era la primera vez que viajaba con casi toda mi clase y con casi todas mis amigos.
A las 12:45, prácticamente puntual, despegó el avión y tras una hora y media larga de vuelo,
llegamos a Milán. Recogimos las maletas, subimos al autocar que nos estaba esperando y nos dirigimos a ver la ciudad de Milán directamente: Ãbamos a visitar muchas ciudades (en comparación con los dÃas que Ãbamos a estar) y querÃamos ver el máximo número de cosas de cada lugar, asà que habÃa que ponerse a caminar y a comportarse como un auténtico turista desde el primer momento.
En casi todos los viajes que he hecho, el dÃa de llegada al paÃs ha sido como "un dÃa perdido" o "una toma de contacto": estaba acostumbrada a llegar al lugar donde me alojarÃa, dejar la maleta, instalarme, etc. Pero aquà iba a ser diferente: casi todos los dÃas Ãbamos a cambiar de hotel porque el viaje estaba programado al estilo de
ruta por diferentes ciudades del Norte de Italia hasta Roma.
Como os decÃa, sobre las cuatro de la tarde comenzábamos a hacer turismo por el centro de Milán: visitamos la plaza de "
El Duomo" donde nos hicimos varias fotos con la catedral de fondo, y también entramos a ver la iglesia por dentro aunque, en mi opinión, la mayorÃa de las catedrales que vimos en Italia, me llamaron más la atención por su arquitectura y estructura externa que por el interior.
Il Duomo es una catedral gótica cuya fachada de estilo neogótico fue pintada por Carlo Pellicani, elegido por Napoleón Bonaparte cuando éste ostentaba el tÃtulo de rey de Italia.
También aprovechamos para dar una vuelta y pasear por las
GalerÃas Vittorio Emanuele donde encontramos a casi todas las
boutiques de importantes firmas como Prada y Louis Vuitton, entre otras y elegantes restaurantes -aunque he de decir que nos llevó un tiempo darnos cuenta de que también habÃa un McDonalds justo en el centro de las galerÃas. El McDonalds estaba decorado de forma diferente a los McDonalds que habÃa visto hasta el momento, era mucho más
chic (como todas las tiendas que hay en las GalerÃas Vittorio Emanuele).
Pero las tiendas, en sÃ, no es lo que más destacarÃa de las galerÃas sino el suelo, las paredes y la enorme cúpula de cristal que deja entrar la luz natural. Debajo de la gran cúpula central de cristal hay un mosaico de un toro donde se dice que hay que dar tres vueltas andando sobre los talones de los pies para volver a Milán. -algo que me llamó mucho la atención de casi todas las ciudades italianas que visitamos es que en la gran mayorÃa hay algún monumento donde hay que hacer o tocar algo para tener buena suerte, regresar a esa ciudad, etc. Al principio, pensé que en Italia habÃa mucha superstición pero ya no sé si es superstición o una atracción turÃstica más. Puede que de todo un poco-.
Después de visitar las galerÃas, salimos por la puerta del final y llegamos a
Piazza della Scala: una plaza cuadrada que en medio tiene una estatua de piedra en honor a Leonardo Da Vinci.
Como no, también nos sobró tiempo para pasear por las calles y alrededores de la Piazza Il Duomo y la fortaleza de Milán.
Al anochecer, el autocar nos llevó al Hotel Ventolosa donde cenarÃamos y pasarÃamos nuestra única noche en Milán antes de partir hacia Sirmione, Verona y Venecia.
Sin duda, me habÃan dicho que Milán era una ciudad industrial pero me la imaginaba diferente. Más que industrial, yo la calificarÃa como una ciudad moderna y cómoda para ir de compras. Pero para hacer turismo, desde mi opinión, no tiene mucho que ofertar dado lo más caracterÃstico, por eso, un par de dÃas para visitar Milán creo que son más que suficientes.
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| Calles de Milán |
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| Interior de Il Duomo de Milán |
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| Entrada principal a las GalerÃas Vittor Emanuele |
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| Pasaje de las GalerÃas VÃctor Manuel |
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| Centro de las GalerÃas VÃctor Manuel |
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| FotografÃas tomadas en las galerÃas de Milán |
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| Piazza della Scala - Estatua a Leonardo Da Vinci |
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El pasado lunes 26 de marzo, sobre las diez de la mañana, llegaba al aeropuerto de Valencia cargada con el pasaporte en una mano, mi maleta y un montón de ganas de viajar. Esta vez, tomarÃa un avión con destino Bérgamo.
